Este es el cuento que hice para la asignatura de expresión.
El
delfín y la estrella.
Había una
vez un delfín que todas las noches miraba las estrellas, todas ellas le parecía
preciosas pero había una que brillaba de una forma especial.
Por muchos
saltos que daba no conseguía alcanzarla.
Una noche
llego su amiga la foca Bailarina y le
dijo:
-
¡Hola amigo
delfín! ¿Por qué estas saltando sin
parar?
-
Porque quiero
que aquella brillante estrella me mire.
-
Y porque con lo bien que bailas tú no bailas para
llamar su atención.
Y los dos
se pusieron a bailar.
Con todo
ese escándalo despertaron a la ballena Cantora.
-
Chicos, ¿creéis que son horas para bailar?.
-
Es que quiero que aquella brillante estrella me
mire.
-
Y porque no pruebas a cantarla nosotros te
ayudaremos.
Y los tres
juntos se pusieron a cantar.
De repente
llego Turga, la tortuga, la más sabia del mar.
-¿Por qué
estáis haciendo tanto ruido?
-Porque
quiero que aquella brillante estrella me mire.
-Déjame
pensar.-Después de unos minutos, Turga dijo.-Se me ha ocurrido una idea, porque
no hacemos burbujas de colores para que suban hasta donde está la estrella.
Entonces
los cuatro empezaron a hacer burbujas, mientras cantaban y bailaban, y las
burbujas comenzaron a subir y a subir hasta donde estaba la estrella.
La estrella
comenzó a sentir cosquillitas por todos los lados y quiso saber de donde
procedían aquellas burbujas.
Cuando vio
de donde venían y vio lo bien que se lo estaban pasando aquellos cuatro amigos
quiso ir a jugar con ellos y como estrella fugaz se lanzó al mar.
Al caer en
él se transformo en una estrella de mar y así fue como la estrella se quedó
para siempre con el delfín.